Traducción:
Alabado sea Allah, y que la paz y las bendiciones de Allah sean con nuestro amado Profeta Muhammad, su familia, sus compañeros y todos los que siguen su ejemplo.
Seguimos sintiendo el aroma del mes de shaabán y sería bueno que mencionemos los aires que traen buenas noticias a todo aquel que sufre una aflicción y que llenan las almas de esperanza de que mañana será mejor de hoy, que, sin duda, la estrechez que se vive hoy se convertirá en holgura gracias a Allah, Glorificado sea, y que el miedo dejará sitio a la seguridad y la enfermedad a la salud.
Los profetas son personas que Allah, Altísimo sea, eligió para que fueran guías para esta Ummah y para toda la humanidad, por eso las pruebas que pasaron fueron mucho mayores para que todas las naciones aprendan que Allah tiene leyes y normas que no cambian incluso con sus profetas.
En el Noble Corán hay muchos ejemplos de pruebas que Allah aplicó a algunos de sus profetas, pero lo llamativo es que después de la prueba, todos los profetas recibían una recompensa mucho mayor que la aflicción sufrida.
En el caso del profeta Jonás, que la paz de Allah sea con él, Allah, Altísimo sea, dice: “Y al del pez. Cuando se fue airado y creyó que no podríamos hacer nada contra él. Y clamó en las tinieblas: «¡No hay más dios que Tú! ¡Gloria a Ti! He sido de los impíos»” Los Profetas: 87. El profeta Jonás, estuvo invitando durante mucho tiempo a su gente para que adoraran a Allah, al final se cansó y salió airado. Subió a un barco y como sabemos lo devoró una ballena en la barriga de la cual permaneció un cierto tiempo. Las probabilidades de que una persona se salve de la barriga de una ballena es nula, y a pesar de eso, él no cesó de evocar a Allah quien dice al respecto: “Le escuchamos, pues, y le salvamos de la tribulación. Así es como salvamos a los creyentes.” Los Profetas: 88. Esta súplica no es específica del profeta Jonás, que la paz de Allah sea con él, sino de cualquier creyente que sufre una aflicción y vuelve a Allah de verdad con el corazón sano y se refugia en Él, entonces Allah lo salvará, de hecho dice , Altísimo sea: “Y le enviamos a cien mil o más. Creyeron” Las que se ponen en filas: 147-148. Eso era lo que el profeta quería, pero después de la dura prueba que sufrió, toda su gente creyó en él.
Otro ejemplo es el profeta Job o el siervo piadoso, que la paz de Allah sea con él, gozaba de buena salud y fuerza. Después fue puesto a prueba al enfermar y estar postrado en la cama durante 18 años, pero fue paciente y tuvo mucha fe en Allah y pudor de Él. ¿Qué hizo? Allah, Glorificado sea, respondió a sus súplicas y plegarias y le dio salud y mucho más bienes tal como nos informó el Noble Corán.
Tenemos también el ejemplo de nuestro amado profeta, que la paz y las bendiciones de Allah sean con él, y lo que le pasó con su gente, en el viaje nocturno y durante su emigración. Todo eso es una prueba de que mañana será diferente de hoy, hoy no es como ayer y que mañana será mejor con la voluntad de Allah, Altísimo sea.
Esperemos las buenas noticias de Allah, en medio de su misericordia que nos envuelve, esperemos todo el bien de nuestro Señor que, no solo, concede a sus siervos bienes, sino que les pone a prueba para agraciarlos con sus favores, pues su gracia en lo prohibido es igual que en lo permitido.
Rogamos a Allah que nos albricia con el bien, haga que estemos bien guiados y seamos buenas guías, no extraviados, que haga que alcancemos el mes de Ramadán y que seamos de los que escuchan las palabras y siguen las mejores de ellas.